Lo que ocurre siempre que este hombre se queda a solas con su compañero de cuarto, es que ninguno de los dos soporta las ganas de hacer un porno gay. Ellos saben que si se besan el culo y se sodomizan, pueden asarse un rato muy sabroso en el que disfruten al máximo con sus pollas. Se desnudan por completo y se apoyan en las ventanas para comenzar a follarse de una forma muy sabrosa que seguramente los lleva al orgasmo.