De tanto agarrarse el cuerpo para luchar, estos dos karatekas de Foxgay sentirán que con esos roces estimulan sus pollas, y terminarán follándose al quitarse sus uniformes y dejarán de un lado sus cintas, para descubrir el placer que se pueden dar con sus pollas para acabar con la pelea. En la posición del perrito el sexo anal será más sabroso para ambos, que no recuerdan haber tenido un encuentro sexual como desde hace mucho.