En plena clase de química, este rubio se enamora del culo de un negrito que le tiene la vista puesta y que sabe que es gay, por lo que esperará a quedarse a solas con él para darle ese beso negro, literalmente, pero eso solo será el principio, ya que en pocos instantes lo estará sodomizando con placer. No hace falta cama, puesto que se apoya sobre la mesa de trabajo para cogérselo por el culo como debe ser.