La primera vez que esta chica asiática visita un gloryhole, se lleva una agradable sorpresa al notar que la polla que sale por el hoyo es bien larga y puede ver hasta las bolas. Se le nota que está un poco nerviosa al enfrentar esta situación, pero rápidamente se da cuenta de que es algo que va a recordar toda su vida, porque la excitación que le provoca ver este palo es increíble.